VÍCTIMAS SOMOS TODOS
Rissig Licha
MIAMI—Francia. Dinamarca, Australia. Y, ahora Túnez. Una concatenación de actos que marcan la globalización de una ofensiva que no respeta fronteras, ni culturas o credos para recordarnos que, en pleno siglo XXI de una era digital que muchos cacarean como la máxima prueba del adelanto del que es capaz la humanidad, vivimos en un mundo que cada día comprueba que no es más que un pobre rehén del filo de un sable que evoca la más retrógrada y sinsentido barbarie que, para colmo, hemos […]